ROCÍO ABREU ARTIÑANO
Presidenta de la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados
¿Cómo crees que la diversidad de género en el sector puede contribuir a la innovación y el crecimiento de la industria?
La diversidad de género en el sector energético contribuye significativamente a la innovación y el crecimiento de esta industria. En primer lugar, la inclusión de perspectivas y experiencias diversas fomenta enfoques más creativos e innovadores para abordar los desafíos en este campo. En este sentido, las mujeres generamos generar soluciones novedosas que complementen las propuestas.
Además, una mayor representación de nosotras en puestos de liderazgo y toma de decisiones aporta estilos de gestión y habilidades diferentes, esto mejora la estrategia y la ejecución de las iniciativas del sector. Nosotras nos enfocamos en la colaboración, la comunicación y la consideración de los impactos sociales y ambientales, cualidades clave para un desarrollo energético.
Por otra parte, la diversidad de género hace que la industria energética sea más atractiva para el talento actual y futuro, lo que permite atraer y retener a los mejores profesionales independientemente de su género. Esto fomenta la competitividad y el intercambio de ideas, impulsando aún más la innovación.
Por ello, la diversidad de género en el sector energético es fundamental para impulsar la creatividad, la eficiencia y la sostenibilidad a largo plazo. Al aprovechar todo el potencial del talento femenino, la industria energética puede expandir sus horizontes y liderar la transición hacia un futuro energético más innovador y resiliente.
¿Qué consejos le darías a otras mujeres que están considerando ingresar a este sector?
Como mujer que ha tenido una trayectoria exitosa en el sector energético, me complace compartir algunos consejos que pueden ser valiosos para otras mujeres que estén considerando ingresar a esta industria.
En primer lugar, es importante tener en cuenta que el sector energético, si bien ha sido tradicionalmente dominado por hombres, ofrece numerosas oportunidades para que las mujeres puedan desarrollar carreras satisfactorias y de alto impacto.
Si bien pueden existir algunos desafíos y sesgos que superar, la industria energética está cada vez más abierta a la diversidad y valora enormemente las perspectivas y habilidades únicas que las mujeres pueden aportar.
Un consejo clave sería cultivar una mentalidad de confianza y determinación. No dejes que los estereotipos o las expectativas limitantes te disuadan de perseguir tus sueños en este campo. Creer firmemente en tus capacidades y estar dispuesta a asumir retos es fundamental para tener éxito. Además, no temas buscar mentores, tanto hombres como mujeres, que puedan guiarte y brindarte apoyo a lo largo de tu trayectoria.
Asimismo, es importante desarrollar una sólida base técnica y mantenerte constantemente actualizada en cuanto a tendencias, tecnologías e innovaciones en el sector. Esto te permitirá destacar y contribuir de manera significativa.
Además, no te enfoques únicamente en los aspectos técnicos; desarrolla también habilidades blandas como comunicación efectiva, liderazgo y trabajo en equipo, ya que son igualmente valiosas en esta industria.
Por último, no tengas miedo de abrirte paso y asumir roles de liderazgo. Tu perspectiva como mujer es sumamente valiosa y puede aportar soluciones innovadoras a los desafíos del sector energético. Sé una modelo a seguir para otras mujeres y contribuye a crear un entorno más inclusivo y próspero para todas.
¿Qué iniciativas o programas crees que podrían implementarse para fomentar la igualdad de género?
Es fundamental fortalecer el marco legal e institucional en materia de igualdad de género.Esto implica revisar y actualizar las leyes existentes, asegurando que estén alineadas con los estándares internacionales y que cuenten con mecanismos efectivos de implementación y rendición de cuentas. Además, se deben dotar de recursos suficientes a las instituciones gubernamentales encargadas de promover y proteger los derechos de las mujeres.
En este entendido, durante mi gestión como Senadora de la República presenté diversas iniciativas para fomentar la igualdad de género en el ámbito laboral; entre las que destacan:
Una para establecer que los patrones con empresas legalmente constituidas deberán someterse a una verificación por parte de las autoridades del trabajo para asegurar el cumplimiento del principio que señala que -a trabajo igual, debe corresponder salario igual-.
Otra para precisar que cuando la integración de la plantilla laboral se componga de al menos el cuarenta por ciento de un mismo género, y el veinte por ciento del total corresponda a mujeres que ocupen puestos directivos.
Ambas propuestas han sido aprobadas por el Senado de la República y se encuentran actualmente siendo discutidas en la Cámara de Diputados para su aprobación.
Ahora bien, se deben implementar programas de capacitación y sensibilización en igualdad de género dirigidos a diversos sectores, como funcionarios públicos, líderes comunitarios, personal docente y medios de comunicación. Esto ayudará a identificar y erradicar los sesgos y las prácticas discriminatorias enraizadas en la sociedad.
Otra iniciativa clave desde mi punto de vista es la inversión en la educación y el empoderamiento económico de las mujeres. Esto incluye asegurar el acceso universal a una educación de calidad, libre de estereotipos de género, y promover el emprendimiento y el desarrollo de habilidades empresariales entre las mujeres, especialmente en áreas tradicionalmente dominadas por hombres.
Adicionalmente, se deben implementar políticas y programas que faciliten la conciliación entre el trabajo y la vida familiar, tales como la licencia de paternidad, la flexibilidad laboral y la provisión de servicios de cuidado infantil asequibles y de calidad. Esto ayudará a mitigar la carga desproporcionada que recae sobre las mujeres en el ámbito doméstico.
Por último, considero que es crucial involucrar a los hombres y a la sociedad en general en la promoción de la igualdad de género. Esto puede lograrse a través de campañas de comunicación y movilización social que fomenten la corresponsabilidad y la participación activa de los hombres en la transformación de roles y estereotipos de género.
¿Qué oportunidades ves para empoderar a las mujeres en el ámbito laboral y económico?
El empoderamiento de las mujeres en el ámbito laboral y económico es fundamental para lograr una sociedad más justa, equitativa e inclusiva.
En este sentido, es crucial garantizar la igualdad de oportunidades y eliminar los sesgos de género en los procesos de reclutamiento, promoción y remuneración. Esto implica examinar cuidadosamente las políticas y prácticas organizacionales para identificar y erradicar cualquier discriminación. Además, es importante implementar programas de capacitación y desarrollo profesional que fomenten el liderazgo y las habilidades de las mujeres.
Otra importante oportunidad es promover el emprendimiento femenino. Facilitando el acceso de las mujeres a financiamiento, asesoría y redes de apoyo, se puede impulsar la creación de sus propias empresas y negocios. Esto no solo empodera económicamente a las mujeres, sino que también genera nuevas fuentes de empleo y dinamiza la economía.
Asimismo, es fundamental invertir en la educación y capacitación de niñas y mujeres, especialmente en áreas tradicionalmente dominadas por hombres, como la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas (STEM, por sus siglas en inglés). Al inspirar y equipar a las mujeres jóvenes, se ampliará el pool de talento femenino disponible en el mercado laboral.
Por otro lado, el fomento de políticas públicas y empresariales que faciliten la conciliación entre trabajo y vida familiar es clave. Medidas como licencias parentales, flexibilidad laboral y servicios de cuidado infantil accesibles, ayudarán a las mujeres a desarrollarse profesionalmente sin tener que renunciar a sus responsabilidades familiares.
Finalmente, es importante visibilizar y celebrar los logros de las mujeres líderes y emprendedoras, convirtiéndolas en modelos a seguir para otras. Esto inspira y demuestra que es posible alcanzar el éxito en el ámbito laboral y económico.
¿Cómo podemos garantizar el acceso equitativo a la educación para todas las mujeres y niñas?
En México, garantizar el acceso equitativo a la educación para todas las mujeres y niñas es un reto fundamental para lograr una sociedad más justa e inclusiva. Para ello, se requiere implementar políticas públicas y programas educativos que eliminen las barreras económicas, sociales y culturales que impiden que las niñas y mujeres accedan a la educación.
Esto incluye asegurar la gratuidad de la educación básica, otorgar becas y apoyos económicos a familias de escasos recursos, y desarrollar estrategias para llegar a las comunidades más marginadas.
Además, se deben implementar acciones afirmativas que prioricen el ingreso y la permanencia de las mujeres en todos los niveles educativos, especialmente en áreas tradicionalmente dominadas por hombres. Esto puede lograrse a través de cuotas, programas de mentorías y acompañamiento, y campañas de concientización sobre la importancia de la educación femenina.
En este orden de ideas, es fundamental abordar los sesgos de género presentes en los planes de estudio, los materiales didácticos y las prácticas pedagógicas. Es necesario asegurar que los contenidos y las metodologías de enseñanza reflejen de manera equitativa las contribuciones y perspectivas de mujeres y hombres, y que se fomenten valores de igualdad y respeto.
También, se requiere invertir en la capacitación y sensibilización del personal docente y administrativo para que puedan identificar y erradicar cualquier forma de discriminación o acoso hacia las estudiantes. Esto, junto con la implementación de protocolos de atención, ayudará a garantizar un entorno educativo seguro y propicio para el desarrollo de las mujeres.
Finalmente, es crucial involucrar a las familias y las comunidades en el proceso de transformación educativa. Mediante campañas de concientización y programas de participación comunitaria, se puede lograr un cambio de mentalidad que valore y priorice la educación de las niñas y mujeres.
¿Cómo podemos trabajar juntos para asegurar que todas las mujeres tengan oportunidades de desarrollo empresarial?
Como ya se ha comentado como Senadora de la República presenté una iniciativa.
para precisar que cuando la integración de la plantilla laboral se componga de al menos el cuarenta por ciento de un mismo género, y el veinte por ciento del total corresponda a mujeres que ocupen puestos directivos.
Junto a este tipo de acciones debemos fortalecer el acceso de las mujeres a recursos financieros. Esto implica la creación de programas de financiamiento y de capital semilla específicamente dirigidos a emprendedoras, así como la eliminación de barreras y sesgos de género en los procesos de otorgamiento de créditos y préstamos. Adicionalmente, se deben establecer redes de inversión ángel y fondos de capital de riesgo que prioricen el apoyo a proyectos liderados por mujeres.
Otra línea de acción clave es proporcionar a las mujeres emprendedoras acceso a capacitación, asesoría y mentoría de calidad. Esto incluye la implementación de programas de desarrollo de habilidades empresariales, de gestión y de liderazgo, así como la facilitación de vínculos con empresas consolidadas y redes de networking que puedan brindar orientación y oportunidades de crecimiento.
Urge abordar los desafíos que enfrentan las mujeres para conciliar el emprendimiento con sus responsabilidades familiares. Para ello, se deben promover políticas y servicios de apoyo, como guarderías accesibles, permisos parentales y flexibilidad laboral, que permitan a las mujeres emprendedoras atender sus necesidades personales y profesionales de manera equilibrada.
Por otro lado, se deben implementar iniciativas de visibilización y reconocimiento de los logros de las mujeres empresarias, con el fin de inspirar y motivar a otras a seguir sus pasos.
Por último, pero no menos importante, es fundamental involucrar a la sociedad en general, incluyendo a hombres y empresas, en la promoción del emprendimiento femenino. Mediante campañas de sensibilización y programas de mentorías, se puede promover una cultura empresarial más inclusiva y que valore el talento y el potencial de las mujeres.
¿Qué acciones específicas podemos tomar para garantizar la igualdad de oportunidades económicas para mujeres y hombres?
Como Senadora de la República presenté una iniciativa para fomentar la igualdad de género en el ámbito laborala fin de establecer que los patrones con empresas legalmente constituidas deberán someterse a una verificación por parte de las autoridades del trabajo para asegurar el cumplimiento del principio que señala que “a trabajo igual, debe corresponder salario igual”.
Además de fortalecer el marco legal y normativo en materia de igualdad de género en nuestro país para asegurar que prohíban la discriminación laboral y salarial por motivos de sexo, y que establezcan mecanismos eficaces de monitoreo y sanciones. También es necesario desarrollar políticas públicas que promuevan activamente la equidad en el acceso al empleo, la promoción y la remuneración.
En este orden de ideas, es necesario implementar programas de capacitación y sensibilización dirigidos a empleadores, tanto del sector público como privado, con el fin de identificar y erradicar sesgos de género en los procesos de reclutamiento, evaluación y ascenso del personal. Esto debe ir acompañado de incentivos y reconocimientos a las empresas que demuestren prácticas laborales más igualitarias.
Por último,considero que es crucial impulsar el emprendimiento y el liderazgo económico de las mujeres. Esto implica mejorar el acceso de las emprendedoras a financiamiento, asesoría y redes de apoyo, así como visibilizar y reconocer los logros de las mujeres en posiciones de liderazgo empresarial.
