PANEL
Patrocinado por:
Speakers:
- Ronny Rodríguez Chaves, Viceministro de Energía. Ministerio de Ambiente y Energía. Costa Rica
- Verónica Torres Fuentes, Gerente de Sostenibilidad Cámara de Comercio de Santiago, Chile
- Carlos Manuel Herrera Santos, Vicepresidente de Desarrollo Sostenible ANDI, Colombia
- Ángel Eduardo Camacho, Consultor en Gestión Integral de RAEE, Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Colombia
- Lucía Herreras Martínez, Subdirectora, WEEE Forum
- Evelyn Espín Arévalo, Directora de Sustancias Químicas, Residuos Peligrosos y no Peligrosos, Ecuador
- Andrés Santana, Gerente de Sustentabilidad, Mabe Andina
(Moderador)
Con invitados de lujo a nivel internacional inició el panel para abordar el tema de Responsabilidad Extendida del Productor (REP). Este principio y enfoque de política ambiental busca que los fabricantes y productores asuman una mayor responsabilidad en la gestión de los residuos generados por sus productos a lo largo de todo su ciclo de vida, incluso después de que el producto ha sido utilizado y descartado por el consumidor.
La conversación, que estuvo principalmente enfocada en los aparatos eléctricos y electrónicos, donde este concepto plantea una extensión de corresponsabilidades a otros actores de la cadena de valor, es decir, que se puede trasladar las obligaciones para que esos productos que cumplen su ciclo tengan un proceso de gestión ambientalmente seguro.
En palabras del moderador Andrés Santana, para el año 2030 se estima que la generación mundial de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos sea cerca de 73.4 millones de toneladas de este tipo de residuos. Es ahí donde entra en juego la REP ya que las normativas definen las obligaciones para estos actores de la cadena de valor.
LA RESPONSABILIDAD EXTENDIDA DEL PRODUCTOR EN LATINOAMÉRICA
Carlos Manuel Herrera Santos, Vicepresidente de Desarrollo Sostenible ANDI, Colombia
Colombia ha sido uno de los países referentes en la implementación del informe de la responsabilidad extendida del productor en la región. Colombia tiene cerca de 10 programas solamente para productos electrónicos; 9 también de otro tipo de bienes, entre los que destacan medicamentos vencidos, plaguicidas, neumáticos, etcétera.
Y es que ¿quién responde por los productos cuando termina su vida útil? Ante este cuestionamiento, empezamos a trabajar con el Gobierno en construir el marco normativo. El año pasado recogimos el 45% de los computadores periféricos puestos de mercado, más o menos el 50% de las lámparas y el 22% de las fibras usadas, que es de lo más difícil de conseguir.
Adicionalmente cabe destacar que el sector productivo tiene que organizarse y anticiparse a lo que hace el Gobierno. Además, diseñamos un conjunto de elementos de pilotos para que la gente conociera los alcances de la normativa de la REP.
Evelyn Espín Arévalo, Directora de Sustancias Químicas, Residuos Peligrosos y no Peligrosos, Ecuador
En mi país desde el año 2013 ya venimos implementando varias políticas de REP, e iniciamos con recolección de celulares. Nuestra experiencia ha permitido que entendamos que no todas las políticas van a funcionar de la misma manera; todos los productos tienen su particularidad.
Es un momento importante para que todos los actores que forman parte de la elaboración de la norma puedan colaborar desde diferentes aristas. Es sumamente importante el tema de la capacidad nacional, ya que, si bien incentivamos una recuperación de aparatos eléctricos, yo necesito saber la capacidad que tengo como país.
El análisis de la capacidad nacional nos permite identificar que hemos iniciado como una meta baja por unos 2 años, lo que nos permitirá entender un poco mejor como un plan puede integrar a todos los actores.
Verónica Torres Fuentes, Gerente de Sostenibilidad Cámara de Comercio de Santiago, Chile
Para impulsar la responsabilidad extendida del productor hay demasiados retos dando vuelta. Para el mundo empresarial, yo diría que tenemos un sólo gran camino que es avanzar hacia el desarrollo sostenible de los negocios, impulsar y a apoyar a las organizaciones para hacerse cargo de sus impactos ambientales.
Pero para hacerlo de manera adecuada es necesario también simplificar todos estos nuevos conceptos. Se están introduciendo en el mundo empresarial conceptos como economía circular, ecodiseño, etc., por lo que se requiere un proceso de adopción y de aprendizaje por parte de las empresas.
Asimismo, se deben establecer metas concretas; nos vemos muy tentados a mirar a países que van mucho más avanzados que nosotros, principalmente en Europa, donde llevan más de dos décadas actuando en estas materias, y por supuesto ya tienen controles mucho más sofisticados con modelos estadísticos, probabilísticos, entre otros.
En el caso de nuestros países latinoamericanos estamos comenzando un camino y por lo tanto hay que tratar de hacer fácil lo difícil. La metodología que se utilice debe considerar factores culturales, la territorialidad, y otro factor importante es la gradualidad.
Lucía Herreras Martínez, Subdirectora, WEEE Forum
Para empezar, se trata de diseñar estrategias que estén alineadas con la situación del territorio, es decir, las políticas o las estrategias tienen que estar trazadas teniendo como punto de referencia el país en el que en el que vamos a trabajar, y para ello es fundamental conocer dónde está, qué tipo, cantidades y flujos del residuo del que se trata.
También se requieren actividades de concientización y de educación, ya que son útiles a corto y a largo plazo. Es en este caso, se trata de una actividad constante y repetitiva para conseguir que los consumidores, los ciudadanos, se conviertan en aliados para lograr incrementar las metas de colecta desde un punto de vista práctico.
Se trata de generar estrategias que permitan mejorar la red de los puntos de colecta para hacérselo fácil al ciudadano, lo que se traduce no solamente en generar más puntos, sino también en hacerlos más visibles.
Ángel Eduardo Camacho, Consultor en Gestión Integral de RAEE, Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Colombia
Para controlar esta gestión debe ser vista de una manera integral, donde están actuando diversos actores. Y lo primero, lo que la experiencia colombiana puede sumar, es que se debe actuar desde la fabricación para después transitar a través de toda la cadena de valor.
En segundo lugar, para cada uno de los actores es necesario contemplar registros, lo que permite cuantificar dónde es posible la recolección misma, coordinando factores como el transporte, la gestión e inclusive la valorización en el exterior.
En Colombia tenemos un registro de productores y comercializadores de aparatos eléctricos y electrónicos, y vamos a implementar un registro también de gestores. Y ojalá a futuro se pueda integrar a los sistemas nacionales ambientales de información que pueden tener cada uno de los países en Latinoamérica.
También será importante contar con una evaluación de desempeño muy bien reglamentada con criterios claros, concisos y una autoridad ambiental competente para hacer esa evaluación, de tal manera que se pueda hacer una métrica adecuada.
Ronny Rodríguez Chaves, Viceministro de Energía. Ministerio de Ambiente y Energía. Costa Rica
En Costa Rica hemos establecido un plan nacional, porque tiene que haber un marco jurídico en la materia. Nosotros pensamos que los gobiernos locales sí tienen una importancia en la responsabilidad al igual que los usuarios.
¿Qué significa esto? ¿Quién usa los productos y cuáles son las prácticas culturales para poder establecer los parámetros de medición? Necesitamos por lo tanto crear una conciencia elevada en el ciudadano para entender qué significa un residuo eléctrico o electrónico en su salud, en los sistemas y en los ecosistemas.
Nuestros objetos en este aspecto han sido establecer un porcentaje la población que tiene que saber que existen centros de recolección. Es decir, el enfoque al final debe tratarse de una responsabilidad compartida y no exclusiva.
Y esto no es un tema de un sólo país, es una responsabilidad global que involucra a diferentes actores: el Gobierno, las corporaciones, el ser humano y su disciplina, así como las alianzas que a distintos niveles puedan llevarse a cabo.